Dr Pau Bosacoma

Nacido en Girona, me licencié en medicina por la Universidad Autónoma de Barcelona (promoción 2006-2012). Desde el inicio de mis estudios, tuve claro que quería ser cirujano. Una vez superado con éxito el examen MIR, inicié mi especialidad en el Hospital Universitario Vall d’Hebrón de Barcelona obteniendo, el mes de mayo de 2018, el título de médico especialista en cirugía plástica en Girona, estética y reparadora. Una vez terminada la residencia, me incorporé al equipo de especialistas del mismo Hospital Universitario Vall d’Hebrón, hasta que en junio del año 2019 surgió la oportunidad de volver a casa y pasar a formar parte de la Unidad Territorial de cirugía plástica de Girona, incorporándome en el Hospital Universitario Dr. Josep Trueta y en el Instituto de Asistencia Sanitaria. Paralelamente, en mayo de 2018, inicié mi actividad en el sector privado en el ámbito de la cirugía plástica y estética, así como en el de la medicina estética.

Durante mis años de formación realicé varias estancias en centros de gran prestigio nacional e internacional, como el St. Andrew’s Centre for Plastic Surgery and Burns del Reino Unido, o el Centro Médico Teknon de Barcelona, las cuales me permitieron adquirir experiencia y perfeccionar mis conocimientos en microcirugía y cirugía estética. Asimismo, con el objetivo de seguir formándome y mantenerme actualizado en las últimas técnicas, en la actualidad, asisto regularmente a cursos y congresos de la especialidad.

El año 2019 superé el examen European Board of Plastic Recontructive Aesthetic Surgery (EBOPRAS), que reconoce los más altos estándares de calidad en cirugía plástica y estética a nivel europeo.

La cirugía plástica reparadora es una especialidad fascinante. Nuestras técnicas nos permiten corregir y/o mejorar, mediante cirugía, distintos procesos patológicos que han alterado la forma o la función de una parte del cuerpo. Por otro lado, con la cirugía estética en Girona ayudamos a tratar todas aquellas alteraciones que, sin ser patológicas, generan una disminución de la calidad de vida de nuestros pacientes, bien sea en el aspecto físico o psíquico.